Ellos, los hombres,
No saben lo que quieren,
Ni aprecian lo que tienen,
Solo saben mirar por ellos
Sin tener en cuenta a la pareja,
Son egoístas y machistas,
A las mujeres, las ven bellas,
Pero solo ven la belleza de fuera,
La que estos hombres miran
Y examinan…,
Con lascivia, y con sus ojos
Las acarician…,
De arriba abajo, y de abajo arriba,
Con sus miradas las desnudan,
Cual si fueran posesión suya,
Pero saben, que nunca suyas serán,
Que nunca las poseerán,
Porque las mujeres,
Conocen estas miradas,
Y saben que con ellas las atacan,
Y nunca se dejarán
Por estos hombres tocar,
Porque saben reconocer en ellos,
Que sus juguetes serán
Y que, pronto sucederá,
Que como a un juguete usado,
Las tirarán…,
Pero claro, todo esto pasará,
Después de las miradas llegarán
Pronto o tarde, a conocerse,
Y así, su vida, compartirán.
¡Ya son dueños del juguete!,
Sus juguetes les servirán
Para no hacer nada en la vida,
Pues ellos se encargarán
De todo solucionar,
Y estos hombres egoístas,
No se lo agradecerán,
Porque para ellos serán
Obligaciones de estas mujeres,
Esos bellos seres…,
A las que un día quisieron,
Y que cuando de ellas se cansaron,
Se ha dicho antes, y la frase se repite,
Pues a la basura tiraron.
Perdonad los hombres en general,
Esta parodia tan singular,
Que ofender no quiere,
Pues ya sabemos,
Que todos sois buenos,
Y que con esas mujeres,
Compartís vuestras vidas,
Para hacerlas felices
Cada día...,
Y hasta el fin de vuestros destinos.
Pero esta salvedad
No es para todos en su totalidad,
Porque algunos hay que menospreciar
Por su comportamiento,
Con las mujeres en general.