Aún tengo en mis recuerdos,
Ese día, que en un pueblecito pequeño,
De montaña, tuviste un gesto cariñoso,
Estábamos, en una pequeña plaza,
Había comenzado el otoño,
Corría una brisa fría,
Como las que empiezan en esos días
En los que el otoño da sus primeros pasos.
Nosotros estábamos enlazados,
Tu notaste que yo frío sentía,
Te levantaste, y cariñosamente,
Te quitaste la chaqueta
Y con ella me abrigaste amorosamente.
Aquel gesto no solo me abrigó el cuerpo,
Me llenó de gozo, de alegría,
Te sonreí, y de repente,
Por ese gesto tan hermoso,
En mi corazón surgió
Todo el amor que por ti sentía,
Tanto me emocioné
Que con lágrimas en los ojos
Un gran beso de amor te dí.